El mundo del ajedrez está de luto, sacudido por el fallecimiento de D. Luis Rentero.
Más allá de las crónicas publicadas, quisiera hablar de mi experiencia personal, siempre amable, siempre un caballero, tuve el honor de enfrentarme a él en dos ocasiones, cuando ambos defendíamos el primer tablero de nuestros respectivos equipos.
Más tarde, cuando el Club de Ajedrez de Sabiote desapareció, tuve la fortuna de
poder jugar en su equipo, el Club de Ajedrez Linares (C.A.L.) quedan muchas anécdotas,
muchos recuerdos que algún día compartiré.
Hoy se impone hablar de
su inmenso amor al ajedrez, de cómo consiguió llevar a su querida Linares a la cima del
ajedrez mundial. Ciertamente, el mejor homenaje que le podemos ofrecer es
promocionar el ajedrez, organizar torneos, mantener vivo su legado y, cómo no,
luchar en cada partida, luchar mientras exista una posibilidad por pequeña que
sea.
Sin duda una gran lección, no sólo para el ajedrez, también para nuestro día a día.
Sin duda una gran lección, no sólo para el ajedrez, también para nuestro día a día.
D. Luis Rentero ya es leyenda.
Descanse en Paz.
Paco.
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